El laboratorio de investigación de las Fuerzas Aéreas de EE.UU. está estudiando sistemas de energía dirigida. Este sistema utilizaría láseres, rayos de partículas u otras tecnologías para formar un campo de fuerza similar a una cúpula sobre vehículos militares o sobre todo EE.UU.
En última instancia, podría utilizarse para destruir armas nucleares enemigas antes de que lleguen a suelo americano.
Un reporte militar sugiere dotar a una flota de camiones o satélites con estos sistemas, que podrían bloquear, debilitar, dañar, destruir o engañar a las armas enemigas. Los oficiales también afirman que podrían tener un producto en funcionamiento para el año 2060.
El sistema utilizaría los mismos principios básicos que el Sistema Cúpula de Hierro de Israel – los científicos dicen que hay que trabajar para super-cargar los rayos de energía.
Las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos están investigando tecnologías de “energía dirigida” (ED) que esperan puedan convertir los rayos de energía en un campo de fuerza que podría utilizarse para destruir misiles enemigos.
En un nuevo informe, titulado “Directed Energy Futures 2060”, la ED se describe como “un haz focalizado de energía electromagnética que se utiliza para permitir o crear efectos militares, cuando se utiliza junto con otros sistemas militares, incluidas las armas cinéticas”. Esto puede incluir láseres, dispositivos de radiofrecuencia, microondas de alta potencia, ondas milimétricas y rayos de partículas, todos los cuales podrían crear al menos cinco efectos militares: “negar, degradar, dañar, destruir o engañar”.
El informe sugiere que el campo de fuerza sería creado por camiones o satélites equipados con láseres u otros sistemas que podrían utilizarse para formar una barrera invisible similar a una cúpula sobre toda la nación. Cualquier misil o avión enemigo que intentara penetrar ese campo de fuerza sería destruido al entrar en contacto con esos rayos de alta energía.
En un comunicado de prensa enviado a The Drive, el científico jefe adjunto de energía dirigida del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL), Jeremy Murray-Krezan, comentó que la tecnología actual de energía dirigida “no es exactamente la de Star Wars” y añadió que este sistema “se está acercando”.
Su comparativa con los fantásticos avances tecnológicos que observamos en Star Wars son los escudos de energía que protegen a las naves, drones y tropas. Esta tecnología en desarrollo se perfila a traer la tecnología ciencia ficción a la indumentaria militar.
“Para 2060 podemos predecir que los sistemas DE serán más efectivos, y esta idea de un campo de fuerza también incluye métodos para destruir otras amenazas”
Jeremy Murray-Krezan
El informe señala que los sistemas DE actualmente desempeñarán importantes funciones militares en todo el mundo. Se están utilizarían en la defensa antiaérea, identificación de objetivos, rastreo, búsqueda y reconocimiento de contrainteligencia y guerra electrónica.
Un hecho que sugiere el informe es que la tecnología producirá un potente campo de fuerza y para lograrlo debe ser turboalimentado para tener mayor eficacia y rendir mayores distancias. Los rayos de partículas, láseres y otros sistemas “deben propagarse a distancias militarmente relevantes”, según el informe.

Aunque la tecnología se denota como un hecho cercano el reporte entregado menciona algunos hechos relevantes para poder aplicarla.
“En la actualidad se considera que los rayos de electrones son los que tienen más probabilidades de encontrar una aplicación militar, aunque actualmente, debido a las limitaciones tecnológicas, la propagación sólo puede lograrse de forma deficiente en la atmósfera terrestre“
El informe sigue con sugerencias sobre como y cuando aplicar este armamento, dado que los americanos no son los primeros en desarrollarlas. La finalidad de promover armas de energía es para que el ejército de los EE.UU se encuentre a la par si llegara a presentarse un conflicto de alto nivel.
La finalidad del reporte es denotar la importancia de un sistema que sea afín al Domo de Hierro usado en Israel. Esta combina drones con sistemas de radares para interceptar misiles enemigos para poder neutralizarlos y reducir los daños. Otro de los hechos que apuntan, es el cuidado del suelo americano para evitar que ocurra otra catástrofe terrorista como la ocurrida el 11S.