Jeff Bezos ha advertido de que se avecina una recesión en Estados Unidos y ha aconsejado a los consumidores y a las empresas que hagan acopio de dinero en efectivo en caso de que se produzca una recesión devastadora.
El multimillonario fundador y presidente ejecutivo de Amazon a declaró a CNN el sábado:
“La economía no se ve muy bien en este momento. Las cosas se están desacelerando, se están viendo despidos en muchos, muchos sectores de la economía. Las probabilidades dicen que si no estamos en una recesión ahora mismo, es probable que estemos en una muy pronto”.
Bezos recomendó a los hogares estadounidenses que retrasen las compras de grandes cantidades, como televisores, frigoríficos y coches nuevos, dado el riesgo de que las condiciones económicas empeoren. Del mismo modo, sugirió a los propietarios de pequeñas empresas que consideren la posibilidad de aplazar las inversiones en nuevos equipos y, en su lugar, crear reservas de efectivo.
El pionero del comercio electrónico no quiso estimar cuánto podría durar la recesión, pero instó a la gente a estar preparada para un desastre económico.
“Quiten de la mesa todo el riesgo que puedan. Eperen lo mejor, pero prepárense para lo peor”.
Los últimos comentarios de Bezos se hacen eco de su respuesta al director general de Goldman Sachs, David Solomon, en octubre, cuando el jefe del banco dijo que hay muchas probabilidades de una recesión en EE.UU.
“Sí, las probabilidades en esta economía te dicen que bajes las escotillas”, tuiteó Bezos en aquel momento.
Andy Jassy, que sucedió a Bezos como consejero delegado de Amazon el pasado verano, parece compartir los temores de recesión de su predecesor. En los últimos meses, Amazon ha recortado costes, ralentizado el gasto y congelado la contratación de ciertos puestos, probablemente en preparación para un contexto económico más duro.
Importantes inversores, ejecutivos, académicos y analistas han hecho sonar la alarma de la recesión este año. Han señalado los esfuerzos de la Reserva Federal para combatir la inflación, que en junio se disparó hasta un máximo de 40 años, el 9,1%, y en octubre se mantuvo en el 7,7%.
El banco central estadounidense se apresura a enfriar la economía y a aliviar la presión al alza de los precios subiendo los tipos de interés. Los ha subido desde casi cero en marzo hasta una horquilla de entre el 3,75% y el 4% en la actualidad, y ha indicado que podrían superar el 5% por primera vez desde 2007.
El resultado es que los consumidores y las empresas estadounidenses pueden tener que soportar la subida de los precios, el aumento de los costes de los préstamos y la contracción de la economía. Es probable que Bezos les recomiende hacer acopio de efectivo para ayudarles a sobrevivir a ese doloroso apretón.
