Un grupo de trabajadores de la salud que demandó a su hospital por el mandato de la vacuna COVID-19 va a recibir 10 millones de dólares, según un acuerdo de conciliación presentado el 29 de julio.
Alrededor de una docena de trabajadores del NorthShore University HealthSystem de Illinois presentaron la demanda en octubre de 2021, argumentando que el centro no concedía ilegalmente exenciones religiosas al mandato.
Tras ocho meses de negociaciones, los trabajadores y NorthShore “han acordado resolver este caso”, según un memorando presentado en el tribunal federal.
Según los términos del acuerdo, NorthShore pagará 10.337.500 dólares a un fondo de conciliación para los trabajadores afectados por su mandato, en concreto, los trabajadores que entre el 1 de julio de 2021 y el 1 de enero de 2022 pidieron una adaptación religiosa y se les negó y recibieron una vacuna para evitar el despido o fueron despedidos o renunciaron. Alrededor de 473 trabajadores entran en esa categoría.
NorthShore también ajustará su mandato de vacunación “para mejorar sus procedimientos de adaptación para las personas con exenciones aprobadas por creencias religiosas sinceras.”
Los trabajadores despedidos por negarse a vacunarse debido a sus creencias religiosas pueden solicitar su reempleo. Se pidió al juez de distrito de Estados Unidos John Kness, la persona designada por Trump para supervisar el caso, que aprobara el acuerdo propuesto.
Liberty Counsel, el grupo legal que representa a los platiníferos, describió el acuerdo como el primero de su tipo para una acción contra un empleador privado que negó cientos de solicitudes de exenciones religiosas a un mandato de la vacuna COVID-19.
Horatio Mihet, vicepresidente de asuntos jurídicos del grupo, dijo en un comunicado:
“El drástico cambio de política y la sustancial compensación monetaria exigida por el acuerdo aportarán una fuerte medida de justicia a los empleados de NorthShore que se vieron cruelmente obligados a elegir entre su conciencia y sus puestos de trabajo.
Este acuerdo debe servir también como una fuerte advertencia a los empleadores de todo el país de que no pueden negarse a dar cabida a quienes tienen objeciones religiosas sinceras a los mandatos de vacunación forzada”
Si se aprueba el acuerdo, los trabajadores afectados podrían solicitar dinero del fondo de 10 millones de dólares.
Cada trabajador que finalmente se vacunara a pesar de plantear objeciones religiosas tendría derecho a unos 3.000 dólares, mientras que los que fueran despedidos o dimitieran podrían obtener hasta unos 25.000 dólares, según las estimaciones.
Las cantidades finales dependerán de cuántos trabajadores soliciten el dinero, entre otros factores. Además, el acuerdo reserva 260.000 dólares para los demandantes nombrados en el caso. Cada uno recibiría unos 20.000 dólares, además de los otros fondos.
Liberty Counsel también pide 2 millones de dólares en concepto de honorarios de abogados, lo que supone un 20% del total del acuerdo.