Mientras los manifestantes y los gobiernos se preparan para una nueva ronda de disturbios durante el próximo fin de semana, con la mayor parte de Estados Unidos preocupada por la festividad de Acción de Gracias, el gobierno italiano, cada vez más autoritario, ha declarado en cambio que un número creciente de trabajadores de la administración pública estará sometido a la obligación de vacunarse.
Según las nuevas normas, las personas no vacunadas no podrán entrar en lugares como cines, restaurantes y eventos deportivos.
Las nuevas y estrictas normas difuminan aún más la línea entre el mandato de vacunación y el statu quo en Italia, lo que podría provocar otra oleada de protestas, como las que recorrieron Roma y un puñado de otras ciudades europeas recientemente, a medida que los gobiernos intensificaban sus restricciones a la vacunación con políticas cada vez más autoritarias.

Según el servicio de noticias italiano Ansa, el gobierno italiano, dirigido por el ex jefe del BCE “super Mario” Draghi, ha decidido “apretar las tuercas”, por así decirlo, a los italianos que se han mostrado “reacios” a vacunarse.
Según informa Reuters, Draghi ha restringido fuertemente el acceso a una serie de servicios, haciendo que las vacunas sean obligatorias para un grupo más amplio de trabajadores del sector público.
Italia ha actuado en un momento en que gran parte de Europa está aumentando las restricciones para intentar hacer frente a una nueva oleada de la pandemia.
En virtud de las medidas italianas, que entrarán en vigor a partir del 6 de diciembre, las personas no vacunadas no podrán entrar en lugares como cines, restaurantes y eventos deportivos, dijo el gobierno del Primer Ministro Mario Draghi en un comunicado.
Draghi hizo una declaración a última hora del miércoles en la que afirmaba que la situación en Italia “está empeorando” y que su gobierno quería actuar antes de que fuera “demasiado tarde”. “Queremos ser muy prudentes”, insistió Draghi, en declaraciones a Reuters.
“Estamos viendo que la situación en los países fronterizos es muy grave y también vemos que la situación en Italia está empeorando gradual pero constantemente. Queremos ser muy prudentes para tratar de salvaguardar lo que los italianos han logrado en el último año”,
El Gobierno amplió la vacunación obligatoria, ya vigente para el personal sanitario, a todo el personal escolar, la policía y el ejército, a partir del 15 de diciembre.
En virtud de las nuevas medidas, que entrarán en vigor a partir del 6 de diciembre, las personas no vacunadas no podrán entrar en locales como cines, restaurantes y eventos deportivos, informó el gobierno del primer ministro Mario Draghi en un comunicado. Además, las terceras dosis de la vacuna, llamadas “de refuerzo”, actualmente disponibles para los mayores de 40 años, se pondrán a disposición de todos los mayores de 18 años.