La operación encubierta del Kraken expone toda la corrupción que hubo en las elecciones

Es importante señalar que las fuentes que ayudaron en esta investigación han arriesgado sus vidas y reputación para que está información sea divulgada, por esto la documentación presentada a continuación ha sido redactada para su protección.

Después de semanas de trabajo, de obtener información de los denunciantes, reuniones con el personal de alto nivel del Departamento de Estado y del Departamento de Defensa, reuniones con varios de los equipos legales y cibernéticos que trabajaban en un esfuerzo masivo para exponer la corrupción que tuvo lugar en las elecciones del 3 de noviembre de 2020, se llegó a la bomba que tenemos en esta información.

El nivel de medidas preventivas y coordinación para monitorear esta elección es muy abrumador. Si ustedes creían que la batalla legal ha terminado, o que nadie será responsable, pues les diremos que están muy equivocado. El ¡fraude! en esta elección fue parte de un golpe de estado premeditado para derrocar al gobierno constitucional y dar paso a un “Orden Liberal Internacional” controlado a través de la gobernanza global que allana el camino para la hegemonía china.

La administración de Donald Trump está llevando a cabo la mayor operación de defensa interna extranjera en la historia de Estados Unidos contra la guerra no convencional. La tecnología de operaciones psicológicas de grado militar se ha comercializado y desplegado junto con máquinas de votación electrónica vulnerables a la piratería que utilizan redes no seguras en un intento de manipular las mentes y los votos de los ciudadanos estadounidenses.

Los gigantes de las noticias falsas y las redes sociales están intentando desmoralizar y engañar a los votantes estadounidenses para que crean que el presidente Trump perdió las elecciones, pero una cantidad insuperable de evidencia dice lo contrario.

Los denunciantes que aparecen en el documental Shadow Gate hicieron contribuciones significativas tanto a los casos civiles como a las investigaciones penales que rodearon esta elección. Mucho de lo que Shadow Gate expuso se ha mencionado en audiencia pública.

Fuentes del Departamento de Defensa, el Departamento de Estado y Whitehouse confirmaron que Shadow Gate condujo a la destitución de un número significativo de personas de puestos clave de liderazgo en el Pentágono. Patrick Bergy, pionero de la herramienta de gestión de operaciones psicológicas militares ShadowNet que aparece en Shadow Gate, figura en la lista para testificar sobre el despliegue de armas de guerra psicológica en las redes sociales diseñadas para influir en las elecciones de 2020. Bergy ha presentado una declaración jurada ante el DOJ y varios de los equipos legales.

ShadowNet no solo se puede usar para psyops, sino que también se puede usar para configurar operaciones de redes de computadoras virtuales para actividades como la no atribución y la piratería. Un infiltrado en las organizaciones de izquierda brindó testimonio de comunicaciones internas y documentación que expone un complot coordinado contra del gobierno.

Su acción golpista involucró influencias extranjeras, grupos de afinidad de base comunista, empleados federales como Senior Executive Services y sindicatos que planean, antes de las elecciones, una acción golpista contra el presidente Trump.

Además de eso se entregaron documentos filtrados de la AFL-CIO, una federación nacional de sindicatos. Según los documentos, su liderazgo estuvo involucrado en una acción golpista bien coordinada.

La sede de AFL-CIO en DC está ubicada en la plaza ‘Black Live Matter’, un escenario para los intentos de alcanzar la Casa Blanca y otros edificios gubernamentales.

Este documento de AFL-CIO detalla de antemano cuándo los resultados de las elecciones cambiarían de Trump a Biden. Anticiparon tiempo y recursos limitados para los desafíos legales apropiados.

Esta información del infiltrado en los grupos de izquierda ha filtrado los documentos de la AFL-CIO que corroboran la evidencia de que se desplegaron miembros corruptos del sindicato en centros de votación para contar los votos y así influir en las elecciones hacia Biden y organizar levantamientos en todo el país en caso de que Trump no conceda la elección.

Tore presentó recientemente una declaración jurada al equipo legal de Sidney Powell que se presentó con desafíos legales en los estados en disputa. En la declaración jurada de Tore, ella dice, ”Puede atestiguar personalmente que en 2013 la administración de Obama / Biden tuvo conversaciones con varias agencias sobre el despliegue de dicho software electoral que se desplegará en Ucrania en 2013. En abril de 2013 o alrededor de esa fecha se estableció un plan anual para financiar y marcar el comienzo de las elecciones en Ucrania. Joe Biden fue designado por Barack Hussein Obama para garantizar que Ucrania aceptara la asistencia. John Owen Brennan y James Clapper fueron los responsables de dar paso a la información de inteligencia en torno a las elecciones en Ucrania. Con el pretexto del apoyo a la crisis, los contribuyentes federales de EE. UU. Financiaron el despliegue del software y las máquinas electorales en Ucrania firmando con Scytl “.

En la declaración jurada de Tore también revela otra joya más, que la Comisión de Asistencia Electoral, que es responsable de asegurarse de que las máquinas electorales sigan las pautas de certificación establecidas en la ley HAVA, ¡No tiene máquinas de votación electrónica certificadas de acuerdo con esas pautas desde 2017!

Los registros públicos muestran que la EAC no ha acreditado a nadie para certificar máquinas electorales desde 2017, lo que implica que las elecciones desde 2017 no han sido certificadas legalmente. Si se aplica, esto podría anular los resultados electorales de 2018, 2019 y 2020.

Hasta ahora, todo ha seguido perfectamente con el manual de jugadas de izquierda de acuerdo con su plan. Parece que este ha sido un complot exitoso contra el presidente, ¿Qué opinan ustedes?

Anticipando que gran parte de esto probablemente sucedería, el 12 de septiembre de 2018, el presidente emitió una orden ejecutiva para asegurar la elección de las mismas travesuras que se presenció en esta elección. Esta Orden Ejecutiva otorgó 45 días después de la elección a las fuerzas del orden y la comunidad de inteligencia para informar sobre cualquier intromisión en la elección y proporcionar una evaluación de activos tales como, “Cualquier interferencia extranjera que tuviera como objetivo la infraestructura electoral que afectó materialmente la seguridad o integridad de esa infraestructura, la tabulación de votos o la transmisión oportuna de los resultados electorales”.

Ivan Raiklin , ex comandante boina verde, abogado y erudito constitucional nos informó durante el almuerzo sobre varias cosas:

Primero, Hay que reconocer que existe una insurgencia extranjera involucrada en una guerra irregular que utiliza a Joe Biden y la elección como parte de un plan para asumir el cargo de la Presidencia a través de un golpe.

En segundo lugar, la constitución brinda muchos elementos contra el fraude electoral generalizado y la interferencia extranjera en las elecciones por medio de la utilización de la 12ª Enmienda que puede entrar en juego el 6 de enero.

Existen actividades entre bastidores dentro del partido republicano para ejercer estos recursos constitucionales. Hasta este momento hay siete estados indecisos que presentaron dos listas de votos electorales tanto para Trump como para Biden. Estas son las bases para una elección impugnada donde la elección no puede resolverse a través del colegio electoral.

Lo que permite que entre en juego la 12ª Enmienda. En este caso, presidente se decide mediante votación en la Cámara, permitiéndose solamente un voto por estado y el candidato con mayor cantidad de votos gana. En este escenario sin duda alguna Trump resultaría victorioso.

Este plan de Trump es una una operación frontal que aparentemente coopera con la defensa interna extranjera.

En relación a esto Raiklin dice:

“Esta evaluación se basa en un extenso cuerpo de inteligencia humana, inteligencia de señales, inteligencia de código abierto (nacional e internacional), inteligencia de imagen, inteligencia de firma de medición e inteligencia financiera, así como divulgaciones de FISA, DOJ y FBI que se remontan a al menos desde febrero de 2014 hasta el presente “.

A su criterio el presidente debe comenzar a realizar sesiones informativas diarias a las 9 p.m. EST transmitidas bajo el Sistema de Alerta de Emergencia desde ahora hasta el 6 de enero de 2021.

Independientemente de cómo se desarrollen los casos judiciales o los escenarios constitucionales, en el peor de los casos, se puede hacer uso a la Ley de insurrección, tomando en cuenta que sólo puede realizarse alrededor del 7 de enero de 2021 o después. Esto permitiría al presidente hacer uso de la acción militar para hacer cumplir la ley. Un ejemplo de esto sería que a través de la Ley de Insurrección, el presidente puede apoderarse de todas las máquinas de votación de Dominion como parte de la recopilación de pruebas.

Ya el pentágono anunció un recorte significativo al apoyo de la CIA a partir del 5 de enero de 2021. Esta medida tendrá un efecto en las operaciones paramilitares de las agencias, especialmente las operaciones internas de contrainsurgencia de la CIA, obligando a la misma a devolver al personal del Departamento de Defensa detallado a la agencia y equipo militar, como drones depredadores.

Hay fuentes que afirman que esto incluirá al software y hardware electoral utilizados para “marcar el comienzo” de elecciones extranjeras, que solo está autorizado para ser desplegado en el extranjero y no para ser utilizado a nivel nacional.

Chris Krebs, exdirector de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad (CISA), fue despedido por la administración Trump por afirmar que las elecciones de 2020 fueron las elecciones más seguras en la historia de Estados Unidos. Hubo un informe de inteligencia que revela que empleados federales planeaban un golpe en contra de la Oficina del Presidente, en dónde también estaba involucrado un ex contratista de la CISA.

Las redes sociales y los principales bmedios de comunicación hicieron todo lo posible por convencer al mundo de que el presidente Trump perdió las elecciones de 2020. Sin embargo, edte movimiento había sido anticipado, por lo que la elección fue presuntamente monitoreada en tiempo real por varias ramas de la comunidad de inteligencia, incluido el ejército, como parte de investigaciones no reveladas.

Este esfuerzo demuestra que hay un efecto poderoso en las motivaciones de los ciudadanos cuando se involucran y participan activamente. Únase a esta lucha que es de todos.