Protestas pacíficas por parte de los habitantes de Londres durante el “día de la libertad” recibieron una respuesta violenta por parte de la policía. Los manifestantes quedaron indefensos frente a los ataques represivos de las autoridades que parecen socavar la libertad de quienes protestan.
Las impactantes escenas tuvieron lugar principalmente en la Plaza del Parlamento, con manifestantes que gritaban a coro “arresten a Boris Johnson” y “vergüenza para la policía”. Rápidamente lo que comenzó como una protesta pacífica por la violación de la libertad se convirtió en una represión inesperada.
Rápidamente las imágenes de las protestas comenzaron a rodar en redes sociales, sin embargo, no duraron mucho antes de ser censuradas. La rapidez y eficiencia para censurar la información de lo ocurrido, lleva a cuestionarse una vez más sobre el poder de ciertos círculos en la información y los medios de comunicación.
Frente a una violación tan evidente de la libertad de expresión no es difícil preguntarse si las “teorías conspirativas” no están tan alejadas de la realidad. ¿Cómo confiar en las noticias que se publican? ¿Cuánta información y situaciones se han mantenido ocultas del público general?
Protestantes reclamando su libertad, una fuerte presencia policial y un día caluroso crearon las condiciones perfectas para el caos que se despertó en la ciudad de Londres. Según los reportes, 11 personas fueron arrestadas.
Algunos de los vídeos que no han sido censurados muestran un posible abuso de la fuerza por parte de los cuerpos policiales.
Este círculo de protestas surgió luego de que este lunes, “día de la libertad” se hiciera público un anuncio que señala que a partir del mes de septiembre sería obligatorio el pasaporte de vacunas para acceder a lugares concurridos. El gobierno indicó además que este sistema se ampliaría a nivel nacional sin limitarse a locales comerciales, extendiendo la medida para todos los lugares de trabajo, incluidas las oficinas.
Los habitantes de Londres no han sido los primeros en protestar contra estas normativas que resultan excluyentes y hasta discriminatorias contra los no vacunados. Escenas similares a las vividas este lunes en la capital inglesa se han vivido en Francia y Grecia.
No obstante, frente a las protestas de gran peso a nivel nacional, el presidente Francés Emmanuel Macron decidió revocar la imposición obligatoria de pasaportes de vacunación para el ingreso a centros comerciales.
El gobierno del Reino Unido por su parte, afirma haber levantado las restricciones en el país. Sin embargo, contradictoriamente el distanciamiento social, el uso de máscaras, las cuarentenas forzadas y el seguimiento del gobierno siguen presentes, empeorando la situación con la introducción de los pasaportes de vacunas obligatorios.
Resulta curioso ver como justamente en el Día de la Libertad se anuncien medidas que buscan limitarla, más sorprendente aún es el hecho de que muchos de los que protestaron contra tales medidas hayan perdido su libertad.